La final de la NBA entre Cleveland Cavaliers y Golden State Warriors, repetición del evento que el año pasado dio el anillo a los de Stephen Curry, llegaba este año con ánimo de revancha. Lebron James prometió un Campeonato a los Cavaliers, y no les ha decepcionado. Tras plantarse en el séptimo partido, un triple de Kirie Irving en el último suspiro del partido dio la victoria final a Cleveland.
7 partidos que se deciden en menos de un minuto
La temporada 15-16 de la NBA, dejémoslo claro, ha terminado por resumirse en un duelo entre Curry y James. Dos jugadores forjados en las canchas de Akron (Ohio) que pugnan por la herencia del gran Michael Jordan. Numerosos piques entre ambos esta temporada y con diversos episodios subidos de tono en estos 7 últimos partidos.
La igualdad de las Finales se deshizo con un horrendo desenlace de los Warrios en el partido decisivo. Casi 5 minutos sin anotar, ideas confusas, Curry estancado en 17 puntos… 88 victorias que no valen un anillo por culpa de Irving, que en el momento de mayor atasco de Lebron sacó su muñeca a relucir y anotó el triple que desempataba el partido a menos de un minuto para el final. Curry falló el suyo y el partido quedaba visto para sentencia. Lebron anotó el último punto, no podía ser de otra forma… y 89-93 para Cleveland, Campeón de la NBA.
Cleveland hace historia: el primero en remontar un 3-1
Los Cavaliers, en el primer Campeonato de su historia, se han convertido en el primero en remontar un 3-1 en contra en las FInales. Los de Cleveland han superado, además, un contratiempo en liza desde 1978: ningún equipo desde entonces había ganado el anillo en un último partido como visitante. Hasta ahora. Irving se disfrazó de James y James fue el de siempre para cumplir la promesa de dar un anillo al equipo de sus amores, tercero de su carrera.
King James, además, se lleva su tercer MVP de las Finales -solo Jordan tiene más- con un promedio de record: 29,7 puntos, 11,2 rebotes, 8,9 asistencias, 2,5 robos y 2,2 tapones. El mejor en todas las facetas. Puro Lebron, que le arrebata a Curry el anillo en el año de los Warriors. Las 88 victorias, el record batido de los Bulls, la temporada perfecta… todo cae en saco roto cuando vuelves a casa sin la victoria final.
Quedará por ver cómo se recuperan los Warriors del batacazo y si James seguirá un año más en Cleveland. Y, después del verano, de nuevo la lucha por un nuevo anillo. ¡Enhorabuena, Cavaliers!
