Al principio del año, muchos éramos los que incluíamos en las quinielas a Russell Westbrook como MVP de la temporada. El jugador de los Oklahoma City Thunders lo tenía todo a su favor para explotar más si cabe en todas las facetas del juego. Tras la marcha de Kevin Durant de la franquicia californiana, el base de los Thunders se quedaba como líder de un equipo que se presuponía que iba a jugar enteramente para él. Pero del dicho al hecho hay un buen trecho y otro sector de los aficionados declaraba que sin su compañero Durant las defensas iban a estar únicamente centradas en él y se iba a ver superado por la presión. Pues bien con ya unas cuantas jornadas jugadas Russ ha callado todas bocas y superado todas las dudas.
Lejos han quedado los tiempos en los que Westbrook, Durant y Harden compartían vestuario y balón en pista. Muy poca bola para tanto jugón. Lo que es estos días se podría ver como un Big Three arrollador capaz de dominar la liga, entonces se vio como una jaula demasiado pequeña para tanto talento. Primero fue James Harden el que se marchó para pasar de ser mejor sexto hombre en Thunder a ser estrella suprema en Houston. Y el verano pasado vimos cómo fue Kevin Durant en esta ocasión el que se marchó a Golden State Warriors para conseguir su ansiado anillo de campeón. Pues bien el escenario está vacío y solo hay un actor, Russell Westbrook como estrella única del film y noche tras noche nos hace disfrutar de su monologo que ya está alcanzando cotas de record.
A estas alturas ya ha dejado de ser noticia que Russell Westbrook haga un triple doble. Tenemos que remontarnos hasta los tiempos de Jason Kidd para recordar a un jugador capaz de sumar ese hito, reservado solo a unos pocos, con tanta facilidad. El último de todos fue anoche ante los New York Knicks en un excelso partido en el que el base sumó: 28 puntos 14 asistencias y 18 Rebotes. Una autentica animalada que sería portada de muchos medios de NBA sino fuera porque ya es el 8º de la temporada y el 3º consecutivo. Con éste, Russ suma ya 45 igualando de nuevo a Lebron James.
Pero no se queda ahí la cosa, con el partido de anoche, Westbrook eleva sus promedios a 30.9 puntos, 11.3 asistencias y 10.3 rebotes. Exacto, en estos momentos sus promedios son en sí mismo un triple doble. Un hito conseguido, que solo estuvo a la altura de la leyenda Oscar Robertson, exjugador de los Milwaukee Bucks, que terminó la temporada 61-62 promediando 30.8 puntos, 11.4 asistencias y 12.5 rebotes.
Si bien es cierto que los Thunders no están al nivel del año pasado, con la victoria de ayer se ponen con un balance de 11 – 8 y se instauran de manera cómoda en zona de playoff, con 4 partidos de sus próximos 5, jugándose en casa. Unos números que invitan al optimismo y que aunque les dejan fuera de las quinielas a campeones de la liga les convierten en un equipo respetado por sus rivales.
Números, equipo y juego centrado en él. Ingredientes más que de sobra para que Russell Westbrook se alce con el título de MVP de la temporada. No hay que olvidar que otros le van a la zaga: Anthony Davis, James Harden y DeMar DeRozan están deslumbrando a todos con sus mejores números. Pero entre tanta estrella, una brilla más que el resto y se llama Russell Westbrook.